El terrorismo global, mayoritariamente islamista, ha abierto el año 2019 con ataques en diferentes lugares del mundo. En Mánchester, la unidad antiterrorista de la policía británica dirige la investigación de un ataque islamista con cuchillo en una estación de tren de esta localidad del norte de Inglaterra. En el atentado tres personas resultaron heridas durante la noche de fin de año. Un hombre, que según varios testigos habría gritado “Alá es grande” en repetidas ocasiones durante el ataque, ha sido detenido y está siendo interrogado por la policía. Entre los heridos, un hombre y una mujer de unos 50 años están hospitalizados con heridas abdominales, mientras que un agente de la policía del transporte británica fue ingresado por una herida en el hombro y ha sido dado ya de alta.
Casi al mismo tiempo, en Tokio, un hombre de 21 años era detenido tras perpetrar un atropello masivo en una concurrida calle del centro de la capital japonesa. El atentado terrorista ha dejado nueve heridos. El incidente se ha producido en la calle Takeshita, en el distrito de Harajuku, que es popular entre los jóvenes y turistas, alrededor de las 0:10 horas local, en un momento en que la calle estaba cortada al tráfico en previsión de las celebraciones de Año Nuevo. Uno de los heridos, un adolescente, se encuentra en estado crítico, según la agencia Kiodo.
Al otro lado del globo, en Barcelona, los vigilantes de seguridad de la Sagrada Familia detectaron en las pantallas de los escáneres de acceso al templo varios objetos que parecían cargadores de munición y varias navajas y cuchillos. El propietario de la mochila donde se encontraban las armas, un ciudadano francés de origen magrebí, fue detenido. En su coche guardaba también una pistola nueve milímetros con el número de serie borrado. El hombre, que aseguró ser un “militar francés”, contó una historia poco creíble según la cual había estado haciendo prácticas de tiro y había "olvidado" la munición en su mochila.
Se da la circunstancia de que apenas unas horas antes, agentes de Policía de la estación Gare de Lyon de París habían detenido a un gendarme francés, también de origen magrebí, que portaba una gran cantidad de explosivos mientras caminaba hacia la zona de embarque de trenes. El presunto terrorista presentó una fuerte y violenta resistencia a su detención.
A la hora de escribir estas líneas, la Dirección General de la Policía francesa ha lanzado un aviso urgente de búsqueda y captura de otro hombre, de origen musulmán, por riesgo de comisión inminente de un atentado terrorista en París.
No hay comentarios:
Publicar un comentario