La Unidad Militar de Emergencia (UME) y vigilantes de seguridad se desplegarán desde mañana por las principales estaciones de Cercanías de Madrid para impedir que se produzcan aglomeraciones como las ocurridas este lunes en andenes y trenes y garantizar la distancia de un metro entre los viajeros.
Desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) han dicho a Efe que los efectivos actuarán entre las 7.00 y las 9.00 horas, el tramo considerado hora punta, en las estaciones de Atocha, Chamartín, Nuevos Ministerios y Sol, dentro de las medidas para contener la expansión del coronavirus.
La función de militares y vigilantes será controlar los andenes, los accesos y el interior de los trenes, de forma que podrán impedir la entrada de viajeros a los vagones que ya estén suficientemente llenos y la bajada a los andenes que hayan completado el aforo aconsejable.
Dentro de los trenes habrá vigilantes de seguridad que velarán por que se mantenga la separación de al menos un metro entre los viajeros, para evitar posibles contagios.
Una avería ha provocado esta mañana, en el primer día laborable del estado de alarma, una alta concentración de viajeros en varias estaciones de Cercanías, con especial incidencia en la de Atocha, en la que confluyen todas las líneas que operan en la región.
El real decreto de estado de alarma no establece restricciones para el servicio de Cercanías y deja en manos de la administración autonómica los posibles ajustes.
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